miércoles, 19 de diciembre de 2012

¿Brochas limpias?


                                                 ¿Brochas limpias?


    ¿Cuánto hace que no limpias tus brochas? Pues manos a la obra que es muy sencillo y tan necesario como tu higiene personal. Antes de nada, tienes que saber que tan importante es el lavado como el secado. Te cuento.







    Puedes lavar tus brochas con el producto que prefieras. Limpiadores como los Brush Cleanser de MAC o de MUFE van muy bien pero hacen la misma función que un champú o jabón neutro y suelen ser bastante caros. A mí personalmente no me gustan porque llevan alcohol y resecan el pelo de la brocha.
 
    Después de probar muchos productos, me quedo sin dudarlo con el champú purificante de Pantene, que las deja como nuevas sin emplear mucho tiempo. Basta con ponerte unas gotas en la palma de la mano y frotar la brocha humedecida. Vas haciendo círculos con mucho cariño hasta que salga espuma. Cuando veas que la espuma empieza a adquirir un color turbio es el momento de enjuagar.  Repite este paso cuanto sea necesario, pero ya verás que no tardará en salir el agua clarita.
 
    Muy bien, ahora toca secar. Este paso requiere menos esfuerzo pero más cariño.
 
    Presiona las brochas con una toalla para quitarles el agua sobrante. Nada de estrujarlas o sacudirlas. Ponlas a reposar en horizontal hasta el día siguiente. Es recomendable ponerles sus fundas para que no pierdan la forma. Yo me las fabrico con la redecilla que viene con los ajos porque está hecha de un material que se ajusta perfectamente al tamaño y forma de cada una y hace la presión justa sin apelmazarlas. Como en la foto, ¿has visto? Otro día te lo explico detalladamente por si has perdido las tuyas.
 
    Pues ya está, ya tienes tus brochas libres de gérmenes listas para maquillar. Ahora no las dejes al aire que se llenan de polvo. Para eso existen las mantas y los estuches.
 
   ¡Atenta! Si quieres que tus brochas tengan el mismo aspecto que el primer día:
 
   1.- Nunca las dejes en remojo.
 
   2.- Jamás utilices suavizante o acondicionador.
 
   3.- Trata de lavarlas boca abajo.
  
   4.- El agua siempre tibia.
 
   5.- Y nada de secador, ni caliente ni frío.
 
   
   En cuanto veas los resultados dejará de darte pereza el momento limpieza.


7 comentarios:

  1. Impresionante!!no hace falta que te diga que nunca he limpiado una brocha, no? ;) Gran tutorial! Seguiré los consejos! CGV

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    1. Que nunca las has lavado? no me lo creo... mejor que las quemes directamente jajaja

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  2. Redecillas de los ajos??? Ni Mcgiver...

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    1. Es muy sencillo, en serio, y muy económico. Hay que reciclar!

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  3. Ostras, yo tampoco las he lavado en mi vida. Tiene algo que ver eso con que sean mucho mas anchas que al principio?? Lo que estoy aprendiendo!! Gracias

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    1. Además de llenas de gérmenes, supongo que tus brochas han perdido toda la flexibilidad. Seguro que tienen el pelo tan duro que hasta pinchan un poquito. Con las brochas así estás maltratando tu piel, sobre todo si la tienes sensible o atópica.

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  4. Tengo un duda... ¿Qué hacéis cuando ya están tan sucias que no se pueden utilizar?

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